14.5.07

rampas para todos

Hace un par de meses, el staff de revista MásExpos asistió al Tianguis Turístico de Acapulco como parte de su labor periodística. En uno de los eventos de noche, una de nuestras compañeras tuvo un pequeño accidente; al día siguiente, le era completamente imposible mover el pie. Su cuarto estaba en el piso once de un prestigiado hotel de Acapulco; el servicio médico, muy escondido, por cierto, estaba a un lado del lobby del hotel. La tarde en la que nuestra compañera descubrió que tenía un esguince y que durante los dos días siguientes tendría que estar en silla de ruedas, decidimos, por mera coincidencia, comer en el restaurante de la playa de dicho hotel. Aquí debería detallar la penosa odisea que le implicó llegar desde el lobby hasta el restaurante, pero no voy a hacerlo: bastará con decir que, mientras a nosotros, a pie, nos tardamos algo entre cinco y siete minutos en llegar, ella tardó casi media hora. Los accesos para sillas de ruedas (i.e. rampas, elevadores de tamaño adecuado, etc.) estaban muy escondidos, casi siempre en sitios en los cuales un turista normal no estaría jamás (a un lado de la bodega, por ejemplo).

Hace un par de semanas, luego de haber terminado la cobertura especial que hicimos del México & Latin America Showcase & Travel Expo en Cancún, una de las meeting planners asistentes me comentaba que, a pesar de haber quedado encantada con México como destino, le preocupaba la casi nula existencia de accesos para discapacitados y para gente de la tercera edad. Ella se dedica, precisamente, a manejar grupos en los cuales viene mucha gente con capacidades diferentes. Cuando le pregunté si ése sería un factor para escoger un destino para sus grupos, me contestó que “no sólo es un factor, sino que es el factor”.

Últimamente se habla mucho sobre el desarrollo de infraestructura turística en México. La reconstrucción de Cancún, primero, y de Oaxaca (la polémica reconstrucción de Oaxaca), después, han implicado enormes sumas de dinero por parte de la iniciativa privada y del gobierno. La generación de productos turísticos, que supone también la inversión en infraestructura (como equipo de iluminación y sonido, en el caso de sitios arqueológicos, o corredores turísticos, o incluso infraestructura vial), y, en general, el trabajo de inversión generalmente va hacia el aumento de la oferta. Sin embargo, parece que en muchos casos el tema de la accesibilidad queda fuera de este esfuerzo.

El día de hoy, la SECTUR anunció el inicio de un programa para “turismo para todos” o “turismo social doméstico”, que implica el desarrollo de centros turísticos accesibles a la población que no puede pagar grandes centros turísticos como Cancún o Los Cabos (y, en muchos casos, Acapulco). Ojo: no se habló de turismo para los pobres, como se hiciera en décadas pasadas (o con iniciativas casi irrisorias, como las de hace poco en el DF), sino de iniciativas que le den importancia al turismo doméstico. La importancia de esto, de cara al turismo de negocios y eventos, es que este turismo, como ningún otro segmento de la industria, contempla la infraestructura para personas con capacidades diferentes y de la tercera edad.

La mira aquí debe estar puesta en las necesidades del visitante, más allá de la capacidad hotelera y de salones o espacios, en la calidad de la infraestructura. Finalmente, uno nunca sabe qué tipo de personas van a asistir a un evento.

Es importante que la propia industria vaya poniendo el ojo a este tipo de estándares de calidad, los cuales están necesariamente implicados en la profesionalización de la industria. ¿Cuántas cosas más habrá que impulsar o apoyar en torno a la totalidad del turismo para que el segmento de eventos y negocios se vea beneficiado?

8.5.07

los juegos de la imagen

Uno de los temas fundamentales a la hora de pensar en turismo es la imagen de un destino. En este sentido, el caso de México es muy particular, dadas sus condiciones sociales, culturales e incluso territoriales: ser la frontera sur de Estados Unidos, ser latinoamericanos y ser, por desgracia, un país que muchas veces da la impresión de ser socialmente inestable o inseguro, son factores que hacen que la imagen, en el caso de México, sea un auténtico reto a asumir por parte de todos. Hace pocos días ocurrió en la capital mexicana un fenómeno que, si bien no tiene relación directa con el turismo, posee una repercusión clara en la imagen del país como destino: el desnudo masivo convocado por Spencer Tunick en el zócalo capitalino.

El polémico desnudo, más allá de ser un tema de controversia, ayuda a promover a México como un país de libertades culturales, de amplia apertura a nuevas expresiones y, de cara al turismo, pone a México como un país de brazos abiertos (gracias, Tabasco, por el slogan). El hecho de que casi veinte mil chilangos hayan asistido al cuadro mayor de la ciudad, con la única intención de participar en una obra de arte, ha convertido al DF en una ciudad cosmopolita a los ojos del mundo. Y es cierto: la Ciudad de México es una ciudad desde la cual cada vez más surgen expresiones de todo tipo. No es casualidad que este año la Ciudad de los Palacios® sea la sede del certamen Miss Universo, ni que el año entrante vaya a ser el escenario del Congreso Mundial del SIDA. Incluso, y a raíz de estos dos eventos, se analiza la posibilidad de que México sea la sede del Mundial de Fútbol del 2010 y de que albergue un campeonato de la NFL. Así de importantes llegan a ser expresiones como la de Tunick de cara al turismo.

Sin embargo, también hay que rescatar de la foto de Tunick y del desarrollo del DF como destino para el turismo de negocios algunas preguntas clave para la industria: ¿bastan este tipo de expresiones para posicionar a un destino? Hay que atender otros temas de fondo, como la inseguridad, por ejemplo. Si bien el Lic. Elizondo ha declarado hace pocos días que la inseguridad no ha agredido al sector turístico, es cierto que algunos puntos del país no lo han visto así: la caída del turismo fronterizo en la primera parte del año, que ha sufrido una baja de nada menos que el 20%, podría ser muestra de ello. Por otra parte, si la industria tiene tal potencial de desarrollo, ¿cuál es su papel como generador de empleo a partir de la imagen del país? ¿Se puede pensar en un turismo de negocios sustentable, que atienda a las necesidades de la industria, pero también a las demandas de México?

La semana pasada ocurrió en Los Ángeles una represión a manifestantes migrantes mexicanos por parte de la policía de elite angelina. Mientras ello ocurría, la discusión en México pasaba de la legislación del aborto a la polémica de Tunick. ¿Qué tanto esta imagen de país abierto al futuro se ve afectada por una situación generada por el mero desempleo y la falta de oportunidades en el país? ¿Qué tanto la propia imagen de México se vería beneficiada por una industria que se ocupara también de dar empleos, combatiendo problemas de inseguridad y otros factores que también afectan nuestro posicionamiento en el mundo?

Sin duda, el lugar de México como destino para el turismo de negocios va mucho más allá de la propia imagen, que, si bien es importante, debe estar respaldada por acciones concretas. No hay que caer en el juego de pensar que expresiones como la fotografía de Tunick bastan para una imagen sólida; mientras esa libertad artística no se vea respaldada por un país con oportunidades, la imagen quedará distorsionada. En este sentido, el turismo de negocios puede tener un papel fundamental, al potenciar las oportunidades mientras posiciona al país y lo promueve; juegos de la imagen, que pueden significar una armonía total entre forma y fondo.

4.5.07

tianguis turístico de acapulco, ¿para América Latina?

Eduardo Yarto, CMP, presidente de MPI capítulo México, es uno de los grandes amigos y colaboradores de la revista MásExpos, así como una de las personalidades más destacadas de la industria. Sin duda, el conocimiento que ha demostrado tener sobre el turismo de negocios en México y el mundo, lo posiciona como una referente necesario para conocer a fondo las necesidades del segmento.

En su calidad de presidente de MPI, en el boletín pasado de la asociación presentó un texto sobre un tema polémico: el Tianguis Turístico, ¿para toda América Latina? Con su autorización, reproducimos este texto que, sin duda, será de gran interés.

El mes de marzo nos dejó una serie de acontecimientos muy importantes para nuestra industria, pero en esta ocasión quiero enfocarme a uno en particular. Durante el pasado Tianguis Turístico, tanto el Presidente Calderón como el Secretario Elizondo, dieron un importante anuncio referente a la internacionalización del Tianguis Turístico de Acapulco.

Se mencionó la intención de que este evento tenga un carácter latinoamericano, por lo que se pretende invitar a los destinos turísticos de Centroamérica, Sudamérica y el Caribe. En principio, esta es una gran noticia, que desde tiempo atrás era una petición de la industria turística. Además, el “Nuevo Tianguis Turístico” le daría a México la oportunidad de competir con eventos en América Latina, que si bien aparecieron años después del nuestro, hoy nos superan en tamaño y participación internacional de expositores, como FIT en Argentina, ABAV en Brasil y ANATO en Colombia.

La iniciativa es verdaderamente interesante, aunque de entrada presenta una gran interrogante: ¿En dónde se va a llevar a cabo este evento? ¿¿¿En Acapulco??? Para ser honestos, un evento de esta naturaleza requiere que presentemos nuestra mejor cara y esa, indiscutiblemente, ya no es Acapulco o por lo menos no el “Acapulco Dorado”, donde hoy se lleva a cabo el Tianguis Turístico.

Por principio, un evento de esta naturaleza requiere una superficie muy superior a la que hoy tiene. Bajo esas características, difícilmente se puede llevar a cabo en el Centro Internacional Acapulco, ya que no hay espacio ni siquiera para el actual Tianguis, el cual, por cierto, se desarrolla en dos pisos debido a que dicho recinto no cuenta con un salón con las dimensiones adecuadas. La primera opción que aparece a la vista es mudar el evento al nuevo Foro Imperial en Acapulco Diamante, donde se contará con un área de 22,000 metros cuadrados, espacio más que suficiente para el nuevo Tianguis.

Sin embargo, la realidad es que si queremos hacer un evento de primer mundo, lo primero que las autoridades deberán hacer es llevar a cabo un análisis de los diferentes destinos mexicanos, revisando sus capacidades en hospedaje, espacios para eventos, conectividad aérea y terrestre, etc. De hecho, lo correcto sería enviar a los destinos mexicanos lo que en turismo de negocios llamamos un “request for proposal” (RFP), que es una solicitud de las necesidades específicas del evento. Posterior a ello, se deberán analizar las postulaciones enviadas por cada destino para seleccionar la mejor opción para el evento, evidentemente poniendo de lado cualquier interés político.

Si queremos tener un gran evento, lo primero es desarrollar un procedimiento adecuado de selección de sede. Por nuestra parte, en MPI Capítulo México aplaudimos la decisión del Presidente Calderón y del Secretario Elizondo, siempre y cuando ésta se lleve a cabo bajo los procedimientos correctos. Finalmente, si queremos entrar a las grandes ligas, hay que hacer las cosas… tal y como se hacen en las grandes ligas.



Eduardo Yarto, CMP
Presidente de MPI, capítulo México

3.5.07

una nueva herramienta para una nueva industria

El turismo de negocios en México es una industria creciente, que en pocos años ha logrado convertirse en uno de los segmentos turísticos más importantes del país. La labor por una industria de meetings, congresos, convenciones, expos, ferias y viajes de incentivo que represente el profesionalismo y el desarrollo en un país como México, posiciona a esta actividad, además, como un medidor de las posibilidades de las ideas nuevas; como una forma de pensar afuera de la tapa, intentar ir un poco más allá y conseguir resultados que generen más posibilidades. Sin duda, una industria tan dinámica y prometedora requiere también de espacios de comunicación más arriesgados y críticos, un movimiento de la información que refleje el movimiento de toda la industria.

Es bajo esta lógica, la del pensamiento fuera de la tapa para una industria que urge nuevos espacios de comunicación, que hemos lanzado el blog de MásExpos. La idea es generar una nueva ventana de información útil para la industria, de un modo completamente interactivo y novedoso. No se trata de la reproducción web de un medio impreso, ni de un portal de noticias o reportajes: se trata del primer blog backstage que narra el quehacer cotidiano de un medio de comunicación inmerso en una de las industrias más dinámicas de un país en desarrollo.

La primera tentación, sin duda, es creer que el blog de MásExpos se trata de un blog corporativo. A pesar de que algo hay de eso, lo cierto es que se trata mucho más de un blog en el sentido amplio: la bitácora de un viaje dentro de la vasta industria del turismo; el viaje dentro de quienes se dedican a hacer viajes. Tampoco es la idea sacar los trapitos de la industria, ni balconear a nadie: sencillamente, es otro nodo para la reflexión dentro de este segmento. Es un espacio plural, destinado a aportar información dinámica a la industria del turismo de negocios.

Para reafirmar el hecho de que éste no es del todo un blog corporativo, ni colectivo, sino un espacio de múltiples individualidades, vale la pena presentar, de frente y sin anonimatos, a quienes estarán escribiendo este espacio. Por lo menos de principio, pretendemos que sea el staff entero de MásExpos, revista de turismo de negocios líder en su campo, quienes vayan poblando este espacio. Después, el tiempo dirá: la idea es seguir en pos de la pluralidad, la reflexión, y el intercambio.

De tal suerte que bienvenidos al primer blog para una industria creciente que promete convertirse en un modelo a seguir en el país entero. Bienvenidos a esta nueva cara de MásExpos.